Por Kathleen Villaluz 24 de marzo de 2017 Las prótesis ya juegan un papel vital en la vida de las personas amputadas al permitirles realizar las tareas diarias de la manera más eficiente posible. Pero, ¿y si un amputado o un robot también pudieran adquirir el sentido del tacto? ¿Qué pasa si también es posible sentir la temperatura, sentir la presión y la sensación de lo que está tratando de tocar o sostener?
Categoría Robótica
27 de enero de 2017 - Una inteligencia artificial llamada Libratus derrota a cuatro de los mejores jugadores de póquer profesionales del mundo en la competencia Brains vs AI. Libratus es un jugador de póquer de inteligencia artificial, un juego que requiere engañar e interpretar correctamente la información engañosa para ganar. La colaboración de la Escuela de Ciencias de la Computación de la Universidad Carnegie Mellon y Rivers Casino en Pittsburgh, Brains vs.
08 de enero de 2017 La primera ley de robótica de Isaac Asimov establece que "un robot no puede dañar a un ser humano o, por inacción, permitir que un ser humano sufra daños". Esta ley está destinada a robots equipados con inteligencia artificial (IA). La IA le da a un robot la capacidad de "pensar" o "razonar". Sin embargo, la mayoría de la robótica que se utiliza alrededor de las personas no es consciente de ninguna manera y no puede obedecer esta ley.
Por Kathleen Villaluz 24 de marzo de 2017 Las prótesis ya juegan un papel vital en la vida de las personas amputadas al permitirles realizar las tareas diarias de la manera más eficiente posible. Pero, ¿y si un amputado o un robot también pudieran adquirir el sentido del tacto? ¿Qué pasa si también es posible sentir la temperatura, sentir la presión y la sensación de lo que está tratando de tocar o sostener?
Si alguien dice robótica, es probable que su mente evoque una imagen de Arnold Schwarzenegger en Terminator o una pieza de metal y plástico de aspecto afilado corriendo por el suelo. Sin embargo, no es el miedo a Skynet lo que nos impide avanzar. Son los materiales que están disponibles actualmente para el desarrollo de la robótica.
Por Kathleen Villaluz 29 de marzo de 2017 Hay algo adorable y reconfortante sobre un niño inocente que se enamora de los juguetes y de las personas nuevas que acaba de conocer. Esta niña, que inocentemente ha confundido un sistema de calentador de agua con un robot, abrazó con adoración y mostró afecto por la pieza de metal sin vida.